Y es un secreto, lo siento. Sólo puedo decir:
Los ciclos abren y cierran las puertas. A veces somos capaces de verlas y pre-sentirlas, antes de cruzar.
Lo importante es que permiten enfocar lo que de verdad es importante.
Paralelamente, ayer tuve un regalo añadido -¡qué día!-, y supe interpretar, por fin, tal vez completamente, los versos finales del Cántico:
"Y la caballería
a vista de las aguas descendía".
Pero es otra historia que contaré en próximos posts.
2 comentarios:
...y pasaré
los fuertes y fronteras...
a mí, sin dejar cosa
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